La importancia de una buena instalación
La instalación adecuada de una estufa a leña es fundamental para garantizar su correcto funcionamiento y facilitar el mantenimiento sin problemas. Aunque en algunos casos la instalación puede parecer sencilla y uno pueda pensar que no es necesario requerir la ayuda de profesionales, nosotros recomendamos hacerlo con instaladores especializados para realizar esta tarea.
A continuación, veremos los dos tipos de instalaciones más comunes:
Instalación de salamandra a leña a través del techo
Esta es la forma más sencilla de instalar el tiraje de una estufa a leña y normalmente requiere entre 3 y 5 caños por sobre la altura de la estufa, si la casa es de una planta.
Después de atravesar el techo, se sugiere encamisar (agregar un caño de mayor diámetro por fuera del caño del tiraje, colocándole lana de vidrio en medio) y llevar hasta los 4 vientos, superando la altura mayor del techo para así asegurar una correcta salida de los humos.
El final es con un sombrerete en su extremo.
Instalación de salamandra a través de la pared
En este caso, la instalación implica un desvío utilizando un codo de 45 grados, un tramo que atraviesa la pared en forma oblicua y otro codo del lado de afuera a 45° para llevar el tiraje a los cuatro vientos. Ese codo exterior también lleva un codo encamisado, siendo todo el tramo exterior encamisado también.
Es importante comprender también el uso de los encamisados. Estos son caños con un diámetro mayor al de los caños principales de la instalación y tienen como objetivo proteger las superficies donde los caños atraviesan la estructura del hogar, ya sea el techo o la pared. Los encamisados se colocan alrededor de los caños principales junto con lana de vidrio para amortiguar el calor y prevenir daños en las estructuras de la casa. Pueden utilizarse tanto en conductos rectos como en codos encamisados. También tienen la función, no menor, de lograr que el tiraje exterior levante temperatura más rápidamente, lo que genera una mayor succión para que no regrese el humo, sobre todo en su encendido.
Instalación de salamandras a leña embutibles o en hogares
Si es posible perforar la chimenea, se puede aprovechar la misma para distribuir aire caliente a otros recintos por medio de una rejilla, como se puede apreciar en la figura A.
Si la chimenea contiene ¨pulmón¨ en su interior. Éste se puede esquivar mediante dos curvas de 45 , como muestra la figura;
en el caso que éste sea de mayores dimensiones que la derivación, será necesario sacarlo para dejar pasar el conducto.
Siempre es conveniente colocar un tapón interior (aislante de chapa y lana de vidrio); entre el conducto original y el conducto,
para que el calor que irradia el calefactor no se pierda por el conducto y se aproveche mediante una rejilla o el calefactor mismo.
En el caso de instalar el modelo insertable dentro de un nicho proyectado, las paredes de éste deben ser de material incombustible
o muros de material sólido y las cuales deben estar separados del calefactor por un mínimo de 15 centímetros.
Recuerda que la instalación de una estufa a leña requiere precisión y conocimientos técnicos para garantizar la seguridad y el buen funcionamiento del equipo. Si no estás seguro de cómo realizar la instalación, es recomendable contar con la asistencia de instaladores profesionales que puedan realizar el trabajo de manera adecuada.
En resumen, la instalación correcta de una estufa a leña es esencial para su funcionamiento y mantenimiento. Se pueden utilizar dos tipos de instalaciones, en el techo o en la pared, y es importante comprender el uso de los encamisados. Siempre es recomendable buscar la ayuda de profesionales para garantizar una instalación segura y eficiente.